miércoles, 10 de junio de 2015

Cap. 32 - Premios, reencuentros, copas, abrazos y Feliz Cumpleaños

Karla
El resplandor de las luces ya no me molestaban, todo ya tenía color ya no veía solo colores blancos y brillantes, el ruido de los gritos y aplausos ya no parecían explosiones en mis oídos y mi cabeza ya había dejado de dar vueltas y mi frente ya no se sentía mojada, cuando alcé la mirada después de la reverencia que habíamos hecho al finalizar nuestra presentación, mi rostro sonreía al ver las caras sonrientes de los espectadores y las luces que aún estaban sobre nosotros, pero que poco se fueron moviendo para ir alumbrando todo el resinto, busque con la mirada a los chicos, pero las manos de todas las personas me impedía verles.

El conductor se acerco a nosotros nos felicito por nuestra participación y llamo al grupo de Samanta quienes entraron felices mientra saludaban “¿es que no puede ser más discreta?” yo solo me concentre en sonreír, pero comencé a sentir una pulsación en mi pecho, me lleve la mano por instinto al corazón y me apreté pero no deje que mi rostro mostrara dolor “no…ahora no, por favor...” pero el dolor no paro ni nisminuyo “¿por qué? Ya me tome la medicina”

-...el sobre-hablo el conductor “esperen…¿desde hace cuanto que esta hablando?” me recargue en Santiago y jale a Minzy simulando que estaba juntándonos para ‘apoyo en equipo’ o algo parecido-que nos dira quien es el ganador de este concurso-lo comenzó a abrir letamente mientras que Samanta estaba ya agradeciendo a los presentes y mandando besos, pero ya nada importaba, como si hubiera sido parte de una película, el sonido dejo mis oídos, los movimientos de las personas comenzaron a ser cada vez más lentos, las luces ya no estaban sobre nosotros y yo, solo veía como se apagaban y se volvían a encender sobre nosotros, no podía escuchar nada, pero veía la cara de alegría de todos los presentes, los típicos papeles de colores volando por el aire a Minzy llorando mientras me abrazaba, pude sentir como Santiago se movía de arriba abajo, mire de nuevo a mi alrededor y todos los espectadores estaban de pie mientras gritaban y aplaudian, algunos estaban brincando mientras movían las manos en el aire, mire a mi izquierda y estaba una Samanta sorprendida mientras veía al conductor con ceño fruncido y este solo subía y bajaba sus hombros para moverse a un lado del escenario, mire a mi derecha y de esta dirección venían corriendo Vanessa y Eduardo hacia nosotros para fundirnos en un abrazo, yo solo mantenía la sonrisa en el rostro, de la nada Santiago me abrazo, coloco el inhalador en la boca y pude sentir un par de disparos que bajaron por mi garganta, cuando acabo lo abrace.

-Gracias…

-No me espantes-contesto, me separe de ellos y alce la mano para saludar a los espectadores.

-¡Muchas gracias por todo su apoyo!-grite a lo que todos contestaron de igual forma, llego el conductor con un rectangulo de dos metros donde aparecia la cantidad prometida para el ganador, $10,000.00 euros y un contrato con una discografica para la realización de un disco de forma profesional, además de una campaña publicitaria para este.

-¡Es un orgullo y honor dar este premio a los ganadores de este concurso, Kara y Santiago integrantes de Los 1000 y 1 voces!-camino hasta nostros el conductor y nos entrego el premio, Santiago y yo nos miramos y sabíamos que teníamos que hacer, después de todo ya lo habíamos decidido-¡¿algo que quieran decir a sus fans?!

-Si…-Santiago tomo el microfono y después de un suspiro comenzó a hablar-muchas gracias por este premio y por las personas que nos apoyaron desde que comenzamos a tocar como grupo, el tener este premio en las manos en casi un sueño…-me miro y yo solo a sentí con la cabeza-un sueño que queremos compartirlo con alguien más, dos personas que de no haber sido por ellos no estariamos nosotros aquí parados en este momento-miro a Eduardo y a Vanessa que nos veían confundidos-este premio…queremos darselo en un 100% a Eduardo y Vanessa “The Wanted”-todos en el lugar gritaron y se quedaron impresionados en especial las personas a las que se les regalo el premio, Santiago se giro y les hizo una seña, ambos caminaron y les entregamos las cosas-se las merecen.

-Pero Saniago…hermano, no…nosotros-trataba de hablar Eduardo pero no podía con sus propias palabras.

-Nosotros no podemos aceptar esto-termino de hablar Vanessa extendiendo las cosas, yo solo se las regrese.

-Tranquila, lo hablamos Santiago y yo…ustedes merecen estas cosas, nuestro momento será otro, no puede ser este y no es el final.

-Pero…es su ultima oportunidad de participar en este concurso-hablo Eduardo.

-También el suyo-contesto Santiago-ustedes fueron expulsados por trucos sucios y con deshonor…muestrenles a los demás de lo que están hechos-concluyo de hablar y tomando de los brazos a Eduardo y Vanessa los colocamos en el centro del escenario mientras aplaudiamos a lo que de nuevo el recinto se nos unio mientras los felicitaban.

He de decir que Samanta no estaba nada contenta con lo que había sucedido en este escenario, ya que también era la última oportunidad de ella para estar en el concurso, pero gracias al staff del lugar me entere que sus compañeros de equipo en realidad eran una banda profesional francesa, tal parece que su padre fue el que los contrato para que participaran con ella en el concurso, alguien de adentro se entero y a pesar de que en realidad ella había ganado, nos dieron el premio a nosotros, sus compañeros se dedicaron a dar autografos al finalizar el consurso ya que habían sido descubiertos, mientras que nosotros nos fuimos a recoger nuestras cosas a los camerinos, me encontraba cerrando la maleta mientras suspiraba cansada.

-¿Seguro que estas bien?-le preguntaba a Santiago mientras me giraba-el haber perdido significa que trabajaras como el sucesor de la empresa de tu padre.

-Si…se que mi sueño era el ser un guitarrista cantautor reconocido y no el dueño de una disquera, pero…ellos lo merecían más que nosotros, esto me servira como CV para mi puesto…solo imagina, ‘ganador y decertor del concurso más reconocido en España’ suena bien ¿no?

-Santiago…-trate de hablar seria con él, pero solo pude ver miedo y confución en sus ojos lo que me hizo detenerme-creo que necesitaras un nombre más chico para eso, no creo que te funcione un nombre tan largo-Santiago solo me miro sonriendo, sin pensarlo dos veces me acerque para poder abrazarlo, algo que él no se quedo atrás para contestar.

-Gracias…-susurro en mi oído-tu ¿cómo sigues?

-Aún estoy algo mareada, pero estoy mejor-le comente cuando nos separamos-estare bien después de un descanso.

-Tienes razón, estuviste mucho tiempo cantando y esforzandote en cada una de las canciones.

-¡Mamá ¿cómo sigues?!-entró Minzy gritando, al vernos abrazados se precupo-¡¿Te mareaste de nuevo?!

-Solo estoy un poco cansada, no te preocupes-le contestaba mientras me separa de Santiago y caminaba hacía ella para abrazarla-todo esta bien.

-Esta bien, te creere-me tomo de la mano mientras caminaba hacía la puerta-ya es hora de irnos, Santiago…por favor trae las maletas-y sin más se salió y comenzó a caminar rápido.

-¡Minzy!-logré escuchar el grito de Santiago, pero no gire la mirada solamente me limite a reír junto a Minzy, llegamos a la entrada y ahí estaban los chicos, quienes nos recibieron con abrazaos y alagos.

-Eso fue realmente profesional-comentó Gustav-aunque debo de preguntar, ¿cómo se sienten al respecto?

-La que me preocupa no soy yo…es.

-Santiago-habño Bill con mal genio mientras se cruzaba de brazos, yo simplemente decidi ignorarlo, ¿cómo? Bueno basta con no apartar la mirada de Gustav.

-Ganar el concurso era la oportunidad de Santiago de seguir sus sueños, ahora que renuncio al premio…-suspire-significa que heredara la disquera junto a sus hermanos y entrara a la Universidad a la primera oportunidad para estudiar administración de empresas.

-Auch-comentó Tom, mientras alzaba la mirada y veía como Santiago venía batallando con las maletas.

-¡Vaya que tardaste!-se quejo Minzy mientras se ponía las manos en la cintura.

-¡No soy una mula personal!-se quejo mientras tomaba aire con dificultad, me acerque a él con la intención de ayudarlo pero de nuevo Minzy me detuvo
               
-Tú no puedes hacer esfuerzos ahora mismo, así que déjalo…que demuestre que esos entrenamientos en el gimnasio que tanto presume hagan su trabajo-comento Minzy mientras tomaba del brazo a Georg y salíamos del lugar, me gire y pude ver como Gustav le ayudaba a Santiago mientras los esperaban Bill, Nayeli y Tom que solo se reían de las caras de este.

-Minzy, sabes que Santi tampoco puede hacer muchos esfuerzos-le comentaba.

-Ya lo sé, pero tampoco es para que este de flojo sin hacer nada.

-¿Se lastimo Santiago?-preguntaba Georg mientras nos abría la puerta.

-Hace unos años, cuando estábamos ensayando en el bar-comentaba mientras entregaba mi pase a los de seguridad, para poder salir definitivamente de ese recinto-un día estábamos arreglando unas cosas y cuando él estaba cargando una caja para colocarla en una estantería…se fue para atrás, tuvimos que llamar una ambulancia por que no se veía bien, lo tuvieron que operar, desde ese día no puede cargar cosas pesadas o esforzarse mucho, incluso el gimnasio lo tiene estrictamente prohibido.

-¿Entonces como se mantiene en forma?-preguntaba Georg.

-Es verdad que no puede ir al gimnasio, pero él a encontrado que correr en las mañanas y practicar Yoga le ayuda a estar en forma.

-Yo no puedo vivir sin el gimnasio-comentó Georg mientras se cruzaba de brazos ara resaltar los músculos que tenía en estos, Minzy sonrió y le toco uno.

-Si…el abuelo es fuerte-respondía feliz de la vida mientras se reía.

Caminamos hasta la salida, donde varias personas nos esperaban, entre ellos los concursantes que fueron eliminados durante el programa, cuando llegamos nadie dijo nada solamente inclinaron sus cabezas y nosotros pasando para finalmente salir de aquel lugar hacia el estacionamiento una vez que llegamos ahí había una camioneta y antes de que nosotros pudiéramos abrir la puerta esta se abrió, dejando pasar a dos pequeñas balas que se me aventaron a los brazos en cuanto tuvieron la oportunidad, por inercia y por las leyes de la gravedad termine en el piso dándome un golpe en la espalda “lo que me faltaba…que alguien me sacara el aire, gracias universo, muchas gracias” me levante y pude ver a dos cabecitas encima de Mí.

-Emily, Javier…pero ¿Qué hacen ustedes aquí?-preguntaba mientras me sentaba en el piso con ellos encima de mí, desvié la mirada hacia la camioneta y ahí estaba Jutta sonriendo, solo pude comenzar a reír y los abrace con todas mis fuerzas hasta que los tres gritamos por aire, los solté y los mire, ellos se veían mejor de cuando los había dejado en Alemania, Emily ya tenía las mejillas sonrojadas y el cabello le brillaba, Javier tenía ya un lindo brillo en los ojos además de que ya no estaba tan flaco, se le veía una leve pancita; yo me había preocupado hace ya tres meses atrás, porque el doctor me había dicho que Javi estaba a dos de tener anorexia gracias a que no comía además de que también estaba dos segundos de tener desnutrición infantil, tanto él como Emily-se ven bien.

-Te extrañábamos mucho, la tía Minzy fue la que mando a buscarnos para que pudiéramos verte cantar, cantas muy bonito-contestaba de lo más feliz Emily, Javi solo me miraba y pude ver que se le aguadaban los ojos.

-¿Qué sucede pequeño, te sientes mal?

-Es que ya…te extrañaba-termino diciendo mientras comenzaba a llorar Emily se separó de mí y camino hasta Tom quien le tomo la mano mientras ella se abrazaba a su brazo.

-Cariño, no llores que me vas a hacer llorar a mí, perdona que los dejara solos-Javi me apretaba con fuerza mientras se desahogaba.

-La tía Jutta es muy buena, cocina rico, amable y nos quiere, pero ella no eres tú-declaraba Javi, mire a Emily y ella también tenía lágrimas en los ojos le estire la mano y ella corrió a tomarla.

-Perdónenme, no nos volveremos a separarnos así de nuevo-pude ver como llegaba Tom y le tomaba la cabeza a Javi, este lo vio y le brillaron los ojos.

-¡No pude ser el hombre!-le decía entre lágrimas, Tom lo tomo en brazos e hizo que lo miraba a los ojos

-Claro que lo fuiste…solo un hombre de verdad admite sus errores y llora enfrente de la persona que es más importante para él-le dijo Javier lo abrazo por el cuello mientras terminaba de llorar, inconscientemente mire a Bill quien tenía la mirada baja, me levante con Emily aferrada a mí y busque a Minzy quien estaba alado de Santiago y Ermine aguantando las ganas de llorar mientras nos veían, me acerque a ella

-Muchas gracias-ella solo puso sonreírme-mira Emily, ella es la tía Minzy, la tía Ermine y el tío Santi-ella alzó la mirada y de la nada se sonrojo al verlos

-Hola-hablo tímidamente a lo que ellos sonrieron y Santiago la tomo en brazos mientras que Minzy y Ermine la llenaban de besos y preguntas, mire alrededor la escena, mis tres amigos de España con mi hermana menor en brazos haciendo que ella comenzara a reír, Tom tratando de consolar a mi hermano más pequeño con ayuda de Georg y Gustav y a Bill abrazando a Nayeli quien miraba la escena encantada ignorando la cara de Bill la cual no reflejaba nada de nada, por más que quise ver algo en él ya no lo veía, me acerque a ellos y le tome la mano a Nayeli y camine hasta donde estaba Emily .

-Bonita, mira ella es Nayeli, una muy buena amiga y mi jefa-Emily la miro y después a Bill, para después sonreírle y acercarle la mano para saludarla

-Soy Emily, la hermana de Karla

-Un placer Emily, yo soy Nayeli, solo considérame una amiga, no la jefa de tu hermana, por favor-después se acercaron Tom, Georg, Gustav con Javi haciéndole caballito para que también saludara a Nayeli, hasta el final llegó Bill que también se presentó a lo que ellos también lo hicieron, caminamos hasta las camionetas y en una nos fuimos Nayeli que estaba platicando con Emily mientras que Bill la miraba estudiando la escena, Javier estaba en las piernas de Tom mientras se acomodaba para dormir un poco y yo, pensé un momento en lo que estaba viviendo en ese momento a pesar de todas las cosas que pasaron durante el concurso, pareciera que ahora no pasaba nada, inclusive parecía una escena del pasado, una escena en la que en lugar de ser Nayeli la que le preguntaba cosas a Emily era mi madre y en lugar de estar en una camioneta, estábamos en la sala que una vez existió en la casa, suspire contrariada y algo melancólica, al momento cuando llegamos al hotel mis dos pequeños ya habían caído en los brazos de Morfeo, Tom y Nayeli me ayudaron con ellos, entremos a la habitación y minutos después llegó Jutta con las cosas de los niños, los cambie arrope y los observe dormir tranquilos y ajenos a todos los males del mundo.

-Son unos angelitos-comento Nayeli mientras salía del baño ya arreglada.

-Son mis ángeles, ellos son los que me mantienen en pie-conteste mientras los admiraba-no estoy segura de querer dejarles

-Serán solo un par de horas, mañana los chicos tiene la agenda llena ya que es el último día que tenemos aquí, te prometo que mañana solo nos dedicaremos a ellos, lo prometo, pero no esta noche, además de que ya habíamos quedado de ir a festejarte hoy, las reservaciones no se pueden cancelar.

-Es cierto, pero…-dirigí la mirada hacia ellos, una vez que se dormían nada los despertaba y menos si ellos habían llorado antes de dormir, suspire cansada y me levante para ir al baño, ahí ya estaba el conjunto que Nayeli había preparado para mí, me cambie a regañadientes  y cuando salí Nayeli les estaba acariciando la cabeza a Emily, en el momento en que ella me miro camino hasta mí y me encamino al tocador del cuarto y me comenzaba a maquillar con la ayuda de la luz del baño que la había dejado prendida ya que no encontrábamos en plena oscuridad por los niños, cuando ella termino les di una última mirada y camine a la puerta afuera se encontraba Jutta-perdona que no te deje descansar Jutta.

-No es molestia alguna, además de que ya me había acostumbrado a su presencia, me va a costar el dejarles

-¿Quién dijo que sería la última vez que ellos van a ver a la tía Jutta? Ellos ya te quieren mucho, no sería capaz de separarlos de ti.

-Gracias mi niña, ahora ve a divertirte que yo te los cuido

-Gracias a ti Jutta-sin más caminamos hasta el elevador y ahí nos esperaban los chicos ya arreglados, yo mire confundida a Nayeli “¿Qué no solo íbamos a ser nosotras?”

-¿Qué? Creías que solamente te iba a cantar las mañanitas y ya, verdad-solo pude asentir, Tom se aclaró la garganta y se acercó a mí junto a Georg los dos me tomaron de los brazos.

-Nosotros la escoltaremos señorita-dijeron al mismo tiempo, solo pude sonrojarme y reír un poco, bajamos hasta el estacionamiento, nadie dijo nada en el camino del elevador a la camioneta, cuando entramos en esta mire a todos, iban muy bien arreglados, no elegantes, pero se veía que estaban dispuestos a estar despiertos toda la noche, Nayeli llevaba puesto un vestido corto plateado que le dejaba la espalda descubierta acompañados con unos tacones igual de plateados con una altura de muerte, Bill que no había dejado de acariciarla en la rodilla, se notaba que estaba más que encantado con el provocador vestido, él iba a juego con ella, con unos pantalones de mezclilla a los que parecía que les habían aventado cloro ya que tenían partes decoloradas, una camisa gris acompañado de una chaqueta, Georg y Gustav optaban por un estilo más casual, pero elegante, ambos con un pantalón de mezclilla, Gustav llevaba unos tenis blancos y una chaqueta encima de su camisa gris, Georg era algo parecido solo que se había cambiado los tenis por unos negros, la camisa por una negra y sin mangas además de una sudadera que llevaba en la mano, Tom en cambio sí que se veía diferente, llevaba un pantalón que a pesar de ser de su estilo, más grande que él, solamente eran un par de tallas más grandes, llevaba una camisa de su talla de manga corta y un chaleco que le daba el aspecto de un chico malo con el que cualquier chica querría una aventura “¡espera un momento! ¿Qué rayos estas pensado Karla?” mire disimuladamente a Tom y al instante mi corazón palpitó con fuerza y a mi mente se me venían a la mente las veces que lo tuve a una distancia de menos de 4 centímetros, al instante desvié la mirada hacia la ventana, hasta que sentí la respiración de Tom en mi oído algo que ya no me molestaba como las primeras veces que lo hizo, ahora me gustaba sentir su aliento cerca de mi cuello.

-Te ves hermosa, aunque creo que te hubiera quedado mejor un vestido corto y sin medias…aun así no tengo objeción alguna con tu conjunto-me susurro al oído, no pude evitar el sonreír y reírme un poco, supongo por los nervios, pero me le quede viendo a mis piernas, yo llevaba puesto un traje completo que terminaba en un mini short, solo que sin mangas adornos en el cuello, como me sentía incomoda enseñando, prácticamente todas mis piernas me había colocado unas medias negras que combinaban con el color plateado oscuro de la ropa, me había puesto un cinturón para darle forma a mis caderas y unos botines de tacón grueso para estar más alta.

-Gracias-le conteste mientras que me abrazaba por los hombros, llegamos al local y para mi nula sorpresa era un antro, digamos que si me hubieran vestido diferente y ellos también me podrían haber sorprendido, solo me reí internamente y seguí a los chicos, como en el hotel Georg y Tom me tomaron de los brazos y me escoltaron dentro del local, me sentí, en cierta forma, poderosa ya que todos me miraban y yo solo caminaba segura de mi misma, ya que no quería montar un espectáculo con una caída en los tacones, pero también, no quería que nadie me rebajara a nada y menos cuando Nayeli me había dicho que me iban a festejar, en parte también ya estaba harta de que Bill cada que pudiera me hiciera sentir inferior a los demás, pero esta noche no, me había prometido a mí misma ser más fuerte cada día, cuando llegamos adentro del lugar pasamos cerca de un grupo de amigos que apenas estaban empezando la fiesta, en cuanto me miraron uno de ellos me guiño el ojo y sonrió coqueto, yo no hice nada solamente me limite a dejar que Tom y Georg me guiarán, me gire a verlos y estos estaban serios, pero Tom en vez de ser serio parecía enojado, caminamos hasta lo que parecía ser la sala vip del lugar algo que tampoco me había sorprendido, ya que ellos siempre terminaban en esta zona para evitar que les molestarán demasiado, siempre existía alguien que los reconocía y que se acercaba a ellos para pedirles una foto o un autógrafo y se cumplió lo dicho ya que no habíamos ni llegado a la mesa cuando un par de chicas se les acercaron y les pidieron la típica foto para subirla a Instagram y a Facebook aparte del autógrafo para guardarlo o vender en EBay.

-Creo que mejor nos vamos a sentar y comenzar a pedir-me grito Nayeli al oído a lo que solo pude asentir, me aclare la garganta y camine con ella “rayos, aun resiento la garganta del concurso…me pregunto ¿podré beber alcohol con la anemia? Algo me dice que no pero…Tom, date prisa que no se si puedo pedir algo, aunque no creo que con la garganta como la tengo deba de tomar algo frío, no quiero perder la voz y menos mañana que les voy a dedicar el día a mi hermanos” nos sentamos y de inmediato comenzaron a llegar las bebidas, Nayeli y yo nos miramos la una a la otra sin saber que estaba sucediendo, el mesero se encargó de que cada bebida tuviera el nombre de para quien era, mire el vaso que tenía enfrente y lo acerque para olerlo “es piña colada, pero…no alcanzo a oler el alcohol”

-Nosotros los pedimos-explico Gustav que iba llegando-buen en realidad fue David el que lo encargo todo, dice que como trabajamos mañana nos quiere moderar con las cantidades de alcohol.

-Como si le fuéramos a hacer caso, ¿no gordo?-le seguía Georg quien llego y le dio un primer trago a su bebida-además de que pidió puras bebidas sin alcohol para Nayeli y Karla, dice que no quiere que les pase nada-se quejó, mire a Nayeli y le dio un trago a su vaso.

-¡Es verdad no tiene alcohol!-exclamo, sin perder tiempo tomo mi copa y también le dio un trago-también el tuyo no tiene-hizo un pequeño puchero que me pareció tierno, solo pude reírme un poco, a los segundos llegaron Bill y Tom quienes se sentaron conmigo y comenzamos a platicar entre nosotros, queda claro que nunca cruce más de tres palabras con Bill, las bebidas seguían llegando a pesar de que según esto David nos estaba controlando, las mías siempre eran sin alcohol, incluso el mesero me dijo que si quería una bebida en especial me la harían sin alcohol para que la pudiera tomar, después de un rato Georg fue a la entrada del lugar y regreso con la que era su novia, ella había viajado hasta España para estar un rato con él, algo que los demás aprovecharon para hacerle burla, pero ellos solo rieron y se fueron a bailar, Gustav se levantó y se fue a la barra según esto a conseguir una bebida de verdad, Bill y Nayeli se levantaron y se fueron a bailar al igual que Georg, algo que me dejo sorprendida  ya que en el tiempo que estuve con Bill él me juraba que no le gustaba bailar y era verdad en las fiestas de mi familia a los que me acompaño siempre bailaba con mis primos por que por más que quería que él bailara conmigo no lo logre nunca “supongo que todo cambia con el pasar de los años, dos para ser exactos”

-¿Estás a gusto?-me preguntaba Tom al oído, no pude evitar el que la piel se me pusiera chinita ya que él tenía el aliento frío gracias al hielo que tenían las bebidas que se había tomado-¿estás bien, cómo te sientes?    

-Estoy bien, no tienes que preocuparte, pero creo que yo…-le mire a los ojos y este me miro, nos quedamos así unos segundos que parecieron horas, el remix que se escuchaba en ese momento de la canción de Lady Gaga, Bad Romance dejo de sonar para nosotros, Tom se fue a cercando a mi yo me hacía un poco para atrás con miedo y deseo, el primero era de lo que podía llegar a pasar y lo segundo con ganas de saber qué era lo que quería hacer, algo que supe a los tres segundos de pensarlo, ya que tenía los labios de Tom sobre los míos, me quede de piedra, él al notar eso me tomo con una mano el cuello y con la otra la cintura para acerarme hacia él, gracias a la presión abrí los labios dando paso a su lengua dentro de mi boca, solamente duramos besándonos cerca de siete segundos, los siete segundas más maravillosos que tuve después de los labios de la persona a la que le entregue mi corazón y me lo regreso con más remiendas que otra cosa, nos separamos y ahora yo tenía agarrada su mano en mi mejilla y la otra en su pecho-Tom…

-No digas nada-sonrió y pego su frente a la mía, yo también solo pude sonreír mientras apretaba su mano.

-Realmente tengo que decirlo-le comente sin moverme de la posición en la que nos encontrábamos

-¿Qué cosa?-podía sentir como movía su mano en mi cintura y su respiración en mi barbilla.

-Tengo que ir al baño-le comente ahogando lo mejor que podía la risa, algo que él no pudo aguantarse-no te rías, te lo iba a decir antes de esto.

-¿Quieres que te acompañe?-yo negué con la cabeza mientras me separaba y lo veía a los ojos, podía ver mi reflejo en sus ojos “ambos estamos sonrojados”

-No me tardo, solo necesito ir

-Corre-me dijo cuándo me levante, camine con las mejillas aún sonrojada hacía el pasillo que llevaba hacia los baños, por muy raro que esto pareciera no había nada de gente aunque con los ruidos que podía escuchar me daba una idea de que era lo que estaban haciendo la personas que estaban escondidos en ese pasillo, camine hasta el baño que era uno de los más alejados además de estar doblando una esquina “creo que mejor si le hubiera hecho caso a Tom y pedirle que me acompañara, este pasillo da miedo”

-Tienes miedo-alguien hablo a mis espaldas, me gire espantada con las manos en el pecho para encontrarme con un Bill recargado en la pared sobre su hombro izquierdo mirándome serio-siempre te dieron miedo este tipo de lugares, incluso las películas de terror hacen que no estés tranquila por tres noches-solo pude suspirar tratando de que en ese suspiro se escapara el miedo

-Si sabes eso, no lo hagas-le conteste mientras me giraba para entrar al baño ya que por el susto casi me hacía ahí mismo, pero antes de que pudiera entrar alguien me tomo del hombro y me pego a la pared para encerrarme ahí con los brazos y hasta con las piernas, ya que tenía una de sus piernas entre las mías y me estaba costando trabajo mantenerme parada bien ya que si lo hacía iba a rozarme con su muslo-¡¿Qué es lo que pretendes?!-grite al momento de sentir como él iba subiendo su pierna para comenzar a tocarme, me asuste y lo tome de los hombros para tratar de detenerlo, pero él me abrazo apresando mis dos brazos con los suyos haciendo que bajara finalmente lo que me faltaba para estar bien postrada en su pierna-¡¡Bill, detente!!

-¿Por qué?

-No, no hagas esto-se fue acercando hasta llegar a mi cuello y empezar a darle de lengüetazos “¡No! Por favor, detente tú no eres así ¿desde cuando haces estas cosas? ¡El alcohol!” –Estás borracho, por favor, detente-a lo que me respondió con un gruñido de queja, se separó de mí y en efecto tenía las pupilas dilatadas.

-No pienso hacerlo, hasta que me contestes.

-¿Qué cosa?

-¿Por qué lo hiciste?-pregunto enojado mientras apretaba más su pierna en mí, se me salió un gemido a lo que lo callé cerrando la boca pero Bill parecía haberlo escuchado ya que sonrió y comenzó a mover más rápido la pierna, para este momento ya no tenía los pies en el suelo, ahora era Bill y su pierna los que me mantenían en pie-¿Por qué lo hiciste?
¿Hacer, que, cosa?-preguntaba a pausas ya que estaba comenzando a faltarme el aire, él se acercó hasta mi oído, yo solo apretaba los dientes lo más fuerte que podía-besarlo, ¿Por qué lo besaste?-al escucharlo se me salió todo el aire que tenía en los pulmones en forma de un gemido

-No-solo pude decir al escuchar lo que había preguntado Bill y él como le había respondido, justo en ese momento la canción de Animals de Maroon 5 comenzó a sonar, Bill la comenzó a cantar en mi oído, era como si el DJ supiera lo que ambos sentíamos dentro de nosotros y lo que hacíamos en estos momentos y la hubiera colocado para nosotros, simplemente era perfecta.

-Baby I’m preying on you tonight, hunt you down eat you alive, just like Animals, Animals, like Animals-cantaba en mi oído mientras bajaba una de sus manos hacia mi cadera y la pegaba a su coxis y seguía moviéndose, cuando tuve los brazos libres le tome la cara y lo obligue a verme a los ojos “por favor Bill, tú no eres así, despierta, despierta por favor”

-Detente, corazón por favor, abre los, ojos, corazón, despierta-trate de hacerlo reaccionar hablándole de la misma forma en la que le hablaba cuando éramos novios, pero no produjo el resultado que quise ya que ahora me estaba besando como cuando se nos pasaba la mano y jugábamos a las ‘manos sueltas’ “no…por favor detente” trate de hacerlo entrar en razón jalándole del cabello pero él solo gemía en respuesta, podía sentir el sabor del alcohol en su saliva, algo que me preocupada, solo había visto a Bill un par de veces borracho al 100% y no había sido una experiencia muy grata, como pude alcé una pierna y lo separe de mi aventándolo contra la pared justo alado de la puerta del baño de chicas, yo también caí al piso tratando de recobrar el control en mi cuerpo ya que no dejaba de temblar, mire a Bill y este tenía una mirada de confusión en su rostro.

-¿Karla, pero que…?-preguntaba mientras se tomaba la cabeza se trató de acercar a mí  lo que solo provoco que me abrazara con miedo-¿Qué…que fue lo que hice?

-No quieres saber-le contestaba enojada y con algunas lágrimas en los ojos, él espantado se acercó corriendo, a lo que yo grite.

-¡Déjala en paz!-grito alguien, ambos nos giramos para ver quien había sido y estaba Tom parado justo a Georg, digamos que la escena no fue la mejor de todas pero era de fotografía, yo en el piso abrazándome mientras lloraba con el cabello revuelto y marcas en el cuello hechas por Bill y él en el piso enfrente de mí con la respiración agitada, con su amigo más que despierto ya que se veía gracias a sus pantalones ajustados y el cabello desecho, Georg no sabía qué hacer, si agarrar a Tom, Bill o a mí, Tom resulto ser el que se moviera primero ya que camino hasta nosotros y tomo a Bill por el cuello de la camisa para levantarlo-¿Qué fue lo que hiciste?-“no…por favor, no otras vez, esto es igual a aquella vez, Tom me defendió de Bill cuando terminamos, en aquella ocasión defendí a Bill, pero ahora” mire a Bill y este no tenía intención de hacer algo, solo miraba a los ojos a su gemelo, como si este le estuviera diciendo todo con esto, algo que no dudaba-eres un…

-¡Tom!-grite mientras brincaba y le tomaba de la mano que había alzado para golpear a su hermano, este me miro sorprendido, de hecho ambos-por favor, detente-le rogaba con lágrimas en los ojos-no se vuelvan a pelear de esa forma, por favor-sin tener más fuerzas en mi mis piernas fallaron y caí al piso cansada, me tome el pecho ya que mi corazón dolía y me costaba respirar.

-¡Karla!-gritaron todos, Georg llego hasta nosotros y me tomo por los hombros ya que parecía que nadie más quería tocarme.
Estoy, bien-los mire preocupada y las lágrimas volvieron-por, favor, no, vuelvan, a, pelear, como, aquella, vez, por favor-volvía a rogar entre cortado gracias a la falta de aire, Georg me comenzó a dar un masaje en la espalda lo que me ayudo a volver a respirar, los volví a mirar cuando recupere el aliento ya se veían un poco más calmado-Bill-este se sorprendió cuando le hable primero a él-Nayeli debe de estar preocupada de donde estas, ve con ella.

-Pero…

-Que vayas con ella-le ordene ya más seria, este se levantó y con la mirada en el piso y las manos en los bolsillo se fue por el pasillo-Tom…-le hable este me abrazo con fuerzas yo no aguante y comencé a llorar de nuevo, no con el sentimiento con el que hubiera querido, pero si derrame unas cuantas lágrimas, Georg al comprobar que ya estábamos más calmados se fue para bailar con su novia, entré al baño, me limpie y al salir Tom estaba esperándome, al verlo una paz me inundaba en el corazón, me acerque a él y me volvió a abrazar, me beso la frente tomándome de la mejilla y después me volvió a besar en los labios, podía sentir un leve sabor a alcohol, pero nada como el sabor que tenía Bill en sus labios, nos separamos y él se aferró a mí-gracias

-El que debería de agradecer debo de ser yo-me separe de él y lo mire extrañada, este saco una pequeña caja de color plata de su bolsillo con el nombre de ‘Pandora’ encima de esta, la abrí aun cuando esta estaba en las manos de Tom y ahí había una pulsera de plata con diferentes amuletos, una chaqueta, una flecha, un niño, una niña, un carro, una rosa y una espada

-Tom, yo…no sé qué decir,

-La chaqueta porque eso fue lo que solidifico nuestra amistad, un niño y una niña que representan a tu familia ya que siempre lo das todo por ellos, la flecha por que con este empezó la nueva Karla, la fuerte, un carro ya que fue en un carro cuando me di cuenta que eres tú, la rosa porque sigues siendo igual de hermosa, pura y amable que antes y la espada porque a pesar de que sigues siendo la misma persona en el interior en el exterior e interior eres una mujer diferente, más fuerte, valiente y sobre todo mucho más hermosa-yo solo pue sonreír cual tonta enamorada mientras que Tom me colocaba la pulsera en la misma mano que la de mi madre, que a pesar de ser tan diferentes se complementaban a la perfección

-Gracias, por todo, porque siempre has estado a mi lado y desde que nos encontramos solo has pensado en mí bienestar, no sé cómo pagarte todo lo que has hecho por mí-este sonrió y me extendió la mano

-Porque no empiezas con bailar conmigo una canción-justo en ese momento comenzó a sonar Every time we touch de Cascada, tome la mano de Tom y comenzamos a caminar por el pasillo para ir a bailar, gracias a todos los santos, nada paso después de lo sucedido enfrente del baño de chicas, cuando dieron las 12 de la noche llegaron Minzy, Ermine y Santiago con un pastel y cantándome las mañanitas, comimos, nos abrazamos, bailamos y finalmente a las dos de la mañana nos fuimos al hotel, Nayeli se fue a acostar con Bill que desde lo sucedido no me había dirigido la mirada ni palabra tanto a mí como a Tom, Georg se fue con su novia a descansar y Gustav solo dijo que esa noche dormiría con tapones para los oídos, Tom y yo que nos habíamos quedado en la puerta de mi habitación nos quedamos solos, entre y pude ver a Jutta despierta con un libro en la mano velando el sueño de los niños, al vernos se levantó y se salió con nosotros

-Buenas noches Jutta, ¿cómo están los niños?

-Lo que le sigue de perdidos, no se han despertado desde que te fuiste, pero no creo que puedas dormir con ellos, están ocupando toda la cama, yo iré a dormir a mi habitación, ya te prepare  el sofá/cama para que lo puedas usar

-Eso hare, gracias-sin más nos dio un beso en la mejilla a cada quien y se fue hacia el elevador, Tom me miro y luego a la habitación donde dormían los niños-buenos, creo que será mejor que cada quien se…

-Dormiré contigo-dijo sin pena y sin escolta, yo lo mire roja cual vil cereza, este sonrió pícaro y se acercó a mi rostro-solo dormir, no quiero dejarte sola con los niños y menos después de lo que paso, no vaya a ser que regreses a tus viejas andadas-dijo mientras tomaba mi brazo y quitaba mi cinta de esa noche dejando a la vista mis cicatrices, yo lo mire y sonreí

-Claro, solo dormir-reí nerviosa y entre al cuarto seguida de Tom-¿Qué no vas a ir por tu pijama?

-Duermo en boxers-lo dijo quitado de pena, incluso había alzado los hombros, agradecí que ya estábamos en la oscuridad de la habitación que él no podía ver lo ahora morada que estaba, lo deje en el cuarto para que se cambiara mientras yo entraba al baño a cambiarme, me coloque la misma pijama que había usado el día que Tom y Georg me habían subido de cenar, “¡demonios! Ahora veo mi pijama muy descarada” suspire para relajarme ya que no había opción de ponerme otra cosa ya que no llevaba otra, cuando salí pude ver a Tom mirando a los niños con una sonrisa en su rostro, los tapo bien, ya que Javi tenía una pierna afuera de la colcha y Emily estaba cual estrella de mar estirada en la cama, cuando termino de acomodarlos me miro, la seriedad volvió a su rostro y debo de decir que a pesar de la oscuridad de la habitación podía ver el brillo de los ojos de Tom cuando alzó la mirada al verme, camino hasta mí y solo se quedó mirando, después sonrió y me cargo para dejarme en la cama, me arropo y él se fue del otro lado entro en la cama y me abrazo mientras suspiraba cansado; a veces envidiaba a los hombres ya que en cuestión de segundos Tom ya estaba dormido, yo me tarde pero debo de decir que me sentía más segura y a gusto después de demasiado tiempo, en los brazos de Tom.
                


 Se que estuve desaparecida desde Enero, pero regreso con un capítulo extra-largo para ustedes, espero que sea de su agrado y que los que leyeron mi historia de "Los Sueños de una Tonta Niña" les haya gustado el final, esta historia ya esta por las últimas ya que no planeo alargarla más, es por eso que ya volveré a publicar con regularidad. Muchas gracias por todo. 












1 comentario:

  1. Fernanda a los meses!!

    Esta buenisimaa. Yo quiero que Carla y Tom esten juntos *.*
    Siguelaaa prontooo :)
    Besos

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