Cap. 7 - Hay personas que te quieren....

Hola chicas ¿como están?, espero que bien n.n y si no ¿que tienes? :/...bueno aquí les traigo un nuevo cap. espero que sea de su agrado, las quiero y muchas gracias a las que leen mi fic, ¡¡¡muchas gracias!!! las quiero, ;D espero comentarios XD jajaja, besos bye bye

Salí del hospital con dirección a un restaurante, me había hecho amiga de un empleado de ahí, su nombre era Enrique, era latino y muy buena persona él siempre me daba algunas sobras de restaurante sin que se dieran cuenta y con eso alimentaba a mis hermanos ya que todo el pequeño sueldo que me daban en las clases de tiro al blanco eran para los gastos del hospital de mi madre…me dejaban pagar en pequeños abonos a causa de nuestra situación económica y también desde que me enteré que mi padre no estaba dando menos de la mitad que había prometido dar todos los meses, “ya sabía que en su trabajo le estaba hiendo mal pero…no creía que lo fueran a despedir tan rápido” llegue al restaurante y Enrique me dio lo que pudo conseguir y una tierna sonrisa, me volví a ir a la casa después de agradecerle, no pude evitar soltar mas de una lágrima en el camino…pude llegar a la casa después de calmarme un poco, les di de desayunar a mis hermanos mientras les aseguraba que papá estaba bien, después de darles todo lo que me había conseguido Enrique tomé mis cosas y me fui a casa de Mía, practicaría un poco antes de irme al trabajo…era claro que tendría que conseguir otro trabajo, pero…no podía dejar solos a mis hermanos, ellos ya ni siquiera iban a la escuela para que no gastáramos de mas, habían dicho ellos, algunos profesores les habían regalado algunos libros y eran los que usaban para estudiar en casa, fuera de eso…no sabían nada.

Llegue a casa de Mía y me puse a practicar en el árbol, no estaba concentrada y una flecha se fue a la copa del árbol.

-rayos…y con lo que puedo comprarme otras flechas-me quejaba mientras comenzaba a escalar el árbol-ven flecha…flechita-balbucea mientras la trataba de alcanzar hasta que lo logré y me senté en una rama-vaya pelea que me diste flecha, no puedes irte a ningún lado, no tengo para comprar otra como tu…me pregunto ¿si te habrás lastimado?-la comencé a revisar y pude escuchar gritos a lo lejos, me estire para ver que es lo que estaba pasado y pude ver a una muchacha como de mi edad o un poco mas grande, estaba corriendo atrás de ella venían varias personas.

-¡eres una zorra!

-¡no debes de estar con él!

-¡aléjate de ellos!-era una de las cosas que le gritaban…ella me recordó a mi cuando me perseguían algunas de las fans de Bill para decirme de cosas, no aguante y comencé a tensar el arco, aquella joven se tropezó y cayo justo debajo del árbol donde estaba yo arriba, una de las fans le iba a tirar una botella de refresco de vidrio y fue cuando tire la flecha, le cayó justo en los pies, todas gritaron y voltearon a ver hacía arriba ahí estaba yo, para mi suerte había dejado las flechas abajo así que, bajé de un salto, al llegar abajo sentí el dolor en la pierna de nuevo pero no le tomé importancia me fui por mis flechas mientras todas me veían, me puse enfrente de la que se había caído mientras volvía a tensar otra flecha, pero una de ella se acercó a mi-¿Quién eres?

-¿Quiénes son ustedes para molestar a la gente?-le preguntaba a ella

-soy la presidenta del club de fans de Tokio hotel-decía orgullosa

-ja, la que es presidente de verdad no es ni siquiera mujer, es Andreas el amigo de ellos, así que no vengas a presumirme tu grado en ese club que se nota abriste tu

-¿acaso no sabes a quien estas protegiendo? ¡Ella es la novia de Bill, es una zorra que lo único que hace el alejarlo de nosotras!

-¡¡¡Si!!!-contestaban todas eufóricas   

-nosotras amamos a Bill y a los demás, ¡no como ella, ella no merece estar con él!

-¡ese no es amor!-le grite, todas se me quedaron viendo-si de verdad lo amaran lo dejarían en paz y serían felices por que él esta sonriendo con alguien mas, aunque les doliera, si el esta bien ustedes lo estarían esas son las fans de verdad, no como ustedes que se nota que lo único que sienten es obsesión por una persona que nunca las voltearía a ver y si lo hiciera sería por que ¡están locas!

-¡¿Qué dijiste?!-me contesto y se intento acercar a mi pero le dispare otra flecha que volvió a dar con el piso, realmente no intentaba lastimarlas, solo las quería espantar-¡esta me las pagas!, vámonos-y se marcharon todas las locas

-vaya ya era hora de que se fueran…-me gire hacía la que parecía ser Nayeli y le ayude a pararse-¿estas bien?

-si…gracias-se levanto y noté que se había raspado la rodilla a causa de que llevaba una falda-auch!

-déjame ver…solo es un corte-me rompí parte de la camisa y le vende la rodilla-ya esta

-gracias pero…tu camisa

-no pasa nada, no es importante, ahora solo ten cuidado de donde andas, ya me di cuenta que eres famosa

-no lo soy…solo que…no soy muy querida, eso es todo-me sentí identificada con ella en todo, los miedos, los gritos, las criticas

-Nayeli…descuida, no todo es malo…hay personas que te quieren-me aleje de ella y tomé mis cosas para poder irme, ese día entraba temprano

-¿Cómo estas tan segura?-me cuestionaba

-¿Por qué será?-decía con nostalgia-solo diré…que se de que hablo, cuídate Nayeli-le dije para comenzar a caminar hacía las clases, ella no me contesto y ni siquiera la volteé a ver, llegue a la escuela después de caminar a paso lento ya que… “¡no debí de haber saltado!” me dolía horrores la pierna pero… “estoy segura que después de un descanso se me pasara” cuando llegue tuve que aguantar los piropos de mi jefe… “ahora no esta aquí Tom para que me cuide”…no le había dicho nada a él de lo que había pasado ya que no quería causarle problemas, es decir…apenas lo volví a encontrar y apenas estamos recuperando aquella amistad que perdimos y no quería estropear las cosas como siempre lo hacía… “soy un accidente con patas”.

-Karlita, ve a ver por que las chicas se tardan tanto en los vestidores-me decía mi jefe mientras me rodeaba con el brazo, yo enseguida me quite y me fui a los vestidores, me encontré con las chicas balbuceando

-¿Qué pasa? El profesor esta desesperado-les preguntaba

-es que se cayó el foco-me explicaba una

-¡alguien se lastimo!

-no nadie pero…hay mucho vidrios en el piso y no podemos ir por los zapatos-era verdad todas estaban descalzas, comencé a caminar por los vidrios del foco, era de esos largos y si que había bastantes vidrios-prepárense les pasare los zapatos ¿vale?

-si!-contestaron todas y comencé a lanzarles los zapatos-¡ya son todos!

-bien, vayan a la clase y no dejen que entré nadie hasta que termine de alzar los cristales, es peligroso

-si, gracias Karla-y después todas se fueron, por si las dudas puse el letrero de piso mojado afuera de los vestidores para que nadie pasara y comencé a limpiar.

-vaya desastre… ¡hay!-grite al haberme cortado-vaya suerte-y comencé a lamerme la herida-debo de terminar-encontré un pañuelo y me lo amare a la mano-bueno es mejor en la mano, que las niñas en el pie…ah! Mejor acabo ya-y me puse a terminar de recoger, después me puse a pasar la popa mojada para recoger cualquier vidrio que se me haya escapado, escuche como alguien abría la puerta-estoy limpiando, salga por favor-decía con la voz mas feliz que pude hacer, pero no escuche algún cambio-hay de ti si te cortas o te lastimas-seguía limpiando

-¿así que hasta aquí has decaído?-me decía una voz que prefería no haber vuelto a escuchar, pare lo que estaba haciendo con los ojos como platos, le estaba dando la espalda-no te reconocí en la casa de Mía…vaya que has cambiado, las lentillas hacen maravillas con el color de los ojos ¿no crees?

-déjame en paz-le decía aun dándole la espalda no quería verlo…-vete por favor

-¿Por qué no me vez a la cara? Oh! Es verdad, ¡te acostaste con mi hermano!-eso me rompió el corazón mas de lo que ya estaba, tomé aire y me gire, estaba enojado y yo también-vaya! Hasta que das la cara

-vete de aquí Bill, estoy trabajando…

-no pienso irme, quiero ver mas de cómo trabajas-decía burlándose de mi mientras se cruzaba de brazos y se sentaba en una banca que había alado de la puerta-¿no estabas limpiando?

-Karla dice el…-entró una estudiante pero se cayó al ver como nos mirábamos Bill y yo-Karla ¿esta todo bien?

-si, ¿Qué pasa?

-dice el profesor que quiere que le veas en su oficina al terminar tu turno

-gracias, dile que lo veré en cuanto termine-y salió, estaba segura que después de 5 minutos estarían todas las niñas escuchando atrás de la puerta

-¿Qué esperas para irte de aquí?-y volví a terminar de limpiar

-solo vengo a decirte unas cosas

-pues dilas…tengo trabajo-cada vez sentía mas y mas un peso en mi pecho, no quería verlo, pero ya lo había hecho “no se ve triste…es mas, se ve mas que feliz desde que esta con Nayeli”, sentí como me tomaban de la mano con fuerza volteándome obligándome a verle a los ojos

-aléjate de Nayeli-me ordeno con ira en la mirada

-¿y quien eres tu para ordenarme?-le preguntaba alejándome de él ya que estábamos muy cerca

-oh! se me olvidaba, apuesto a que solo obedeces ordenes de Tom como… ponte en cuatro-le solté una cachetada y las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos

-¡eres un desgraciado!

-¿desgraciado…yo?, ¡tu eres la que se estuvo revolcando con mi hermano y ahora estas acosando a Nayeli!

-¡¡¿Qué?!! ¡Tú estas enfermo! ¡Y si de verdad te importaron los 3 años que estuvimos juntos, sabrías quien soy yo, Kaulitz!-Bill solo me miró, yo estaba desecha, las lágrimas no paraban de caer pero estaba enojada…la ira era mas que la tristeza

-¡eres tu la que no le importo ese tiempo y estas molestando a Nayeli!

-¡hay por favor! ¡Si supieras cuidar a las personas que están a tu alrededor, no hubiera tenido que cuidarla!

-¡¡¡yo si cuido a las personas que amo!!!

-¡¡¡ósea que a mi no me amabas, por que siempre estuve lastimada por tu culpa, eran simples palabras las que me decías!!!-le grite mientras aventaba la popa al piso, me había desgarrado la garganta con ese grito, ya que me dolía

-Karla…

-vete…vete no quiero verte…-le pedía ronca

-espera yo…

-¡¡que te largues!!-le grite mientras me tiraba en el piso a llorar, mientras me abrazaba a mi misma-ya no me lastimes….por favor….ya no…ya no-sentí como alguien salía de los vestidores y alguien mas entraba para abrazarme, alcé la mirada y pude ver a-Logan…

-calma, estoy aquí…

-me grito…me dijo cosas feas…no quería volver a verlo-le decía mientras lo abrazaba y me desahogaba en su camisa

-calma…aquí estoy-me consolaba mientras me acariciaba la cabeza-¿Cómo supo que trabajas aquí?

-no losé debió de verme cuando me tope con Nayeli y de aseguro me siguió-le contestaba mientras me separaba de él ya mas calmada-gracias Logan pero… ¿Qué haces aquí?

-Tom me llamo preguntando por ti, le dije que te habías ido a trabajar y me pidió que viniera por ti, ya que él no puede, además esta enojado ya que no le dijiste que entrabas temprano hoy-decía con una sonrisa que hacía que mis problemas desaparecieran

-si… ¿Qué hora es?

-ya es tu salida…estuviste ocupada por lo que veo

-si…algo así, tengo que ir con mi jefe ¿me esperas?

-claro-me paré y salimos de los vestidores, todas las niñas estaban platicando afuera de estos, al verme todas corriendo a mí

-¿estás bien?

-¿Quién se cree él para gritarte?

-¿segura que no te paso nada?-me cuestionaban todas, me sentí feliz por un momento y una sonrisa se dibujo en mis labios, mientras que una lagrima fue rodando por mi mejilla, todas me abrazaron

-muchas gracias a todas…las quiero

-¡y nosotras a ti!-me solté de ellas

-bueno, tengo que irme mi turno ya acabo, las veo mañana

-¡hasta mañana!-y me fui alejando con Logan a mi lado, hasta llegar a la oficina del depravado sexual…perdón mi jefe, toqué la puerta

-¡adelante!

-con permiso…-avise mientras entraba al verme cambio su mirada, eso me enfermaba

-Karlita, por ti no hay que anunciar, entra cuando quieras y…como quieras-me senté en la silla de enfrente de su escritorio

-¿para que querías verme?

-solo quería decirte que es hora de que aceptes mi oferta…-se paro y comenzó a caminar y cerró la puerta con seguro, siguió caminando hasta quedar atrás de mi, me tomo por los hombros y me susurro al oído-…se mi amante-le iba a dar una cachetada pero me tomo la mano y me tumbo encima del escritorio

-¡suéltame!-gritaba

-grita lo que quieras, nadie te va ah escuchar-y comenzó a tocarme y a pasarme su asquerosa lengua por mi cuello-no quiero tener que despedirte

-¡¡¡¡déjame!!!!-gritaba mientras trataba de quitarme de encima, pero me apretó un pecho-¡¡Ah!!

-eso es ¡grita, grita!-y me comenzó a apretar mas fuerte

-¡¡¡AAHH, NOO!!!-y como pude alcé una pierna y le di un golpe en su miembro, este grito y se cayó del escritorio, yo me pare y me tape con miedo mientras abría la puerta, pero…-¡¡Maldición!!

-¡no vas ah salir de aquí perra!-me decía mientras agarraba mi cabello y me tiraba en el piso